La mazamorra, una preparación de maíz con leche, comida tica de muchos países de Latinoamérica, refieren a una receta culinaria que en gran medida aporta nutrientes esenciales para el organismo al ser su componente principal el maíz, cereal dulce de contenidos importante como hidratos de carbono, vitaminas, fibra y sales minerales necesarios para el cuerpo y la mente.
La mazamorra una comida deliciosa apropiada para el desayuno o el almuerzo, de un contenido calórico importante pero que a la vez no un alimento riesgoso para quienes le consumen, siempre y cuando se haga de modo moderado, en las cantidades adecuadas a las necesarias a cada quien particularmente, en tanto que en exceso también puede resultar en acumulación de unidades de energía que nada bien le hacen a tu salud corporal y tu figura.
La mazamorra no engorda y en realidad ningún alimento lo hace por sí solo, siendo la verdad real de que el sobrepeso depende directamente del desequilibrio nutricional, del consumo desmedido de los alimentos que en grandes cantidades pueden producir efectos adversos a los que refiere la salud integral.
Beneficios y/o propiedades de la mazamorra
Consume mazamorra si lo deseas sin ninguna preocupación, incluye esta receta culinaria en tu dieta diaria sin temor de que con ella incrementes algunos kilitos de más, en tanto que sus benéficos son muchos. A continuación algunas de sus propiedades más importantes.
- Tiene acción antioxidante que contribuye a combatir los radicales libres
- Y el envejecimiento celular
- Es un alimento perfecto a incluir en una dieta para adelgazar, en tanto que en las cantidades adecuadas ayuda entre otras cosas a saciar el hambre fácilmente por su alto contenido en fibra e hidratos de carbono que ayudan a controlar el apetito
- El maíz un producto esencial para el cuidado del cerebro por su contenido en ácido fólico
- Contribuye a mantener en buen estado el sistema cardiovascular por su aporte en vitamina B1
- En lo que a la leche respecta presenta una variedad nutricional muy rica en calcio, fósforo, magnesio, zinc, yodo, selenio y vitaminas A, D y del complejo B.